Antifascista es toda aquella persona que defiende valores democráticos como la paz, la justicia y los derechos humanos para todos, es toda aquella persona que se siente agredida por los sucesores del golpe fascista del ‘36, que con toda impunidad organizan actos en los barrios populares promoviendo el racismo y la xenofobia con la aprobación de las instituciones y los responsables políticos. Es la indignación ante esa realidad la que moviliza a nuestros hijos e hijas para tratar de impedir estos actos y de levantar una voz en contra de los discursos del odio.
El 11 de noviembre de 2007, la organización ultraderechista Democracia Nacional convoco una manifestación en contra de la inmigración en el barrio de Usera, barrio obrero y multicultural, donde conviven trabajador@s procedentes de diferentes territorios. Josué Estébanez, neonazi y militar de profesión, acudía en metro a dicha manifestación armado con un cuchillode caza. Carlos Palomino, joven antifascista vallecano, pretendía llegar a Usera para expresar su rechazo al fascismo, al racismo y la xenofobia. Josué Estébanez, asesinó a Carlos Palomino en el metro de Legazpi de una puñalada en el corazón, e hirió gravemente a otro compañero antifascista, apuñalándole dos veces en el pulmón.
Somos madres y padres antifascistas. Conocemos la lucha que llevan nuestr@s hij@s, compartimos sus VALORES Y PRINCIPIOS, les apoyamos incondicionalmente, y estamos orgullos@s de ell@s.
Hemos sufrido junto a Mavi el asesinato de su hijo Carlos, y hemos padecido el vergonzoso tratamiento ofrecido por los llamados medios de comunicación, que en lugar de dar una visión real y objetiva de lo sucedido, se han dedicado a difundir la idea, “que ha sido un caso aislado, fruto de una pelea entre bandas”, igualando víctimas y agresores.
Sabemos, por desgracia, que el asesinato de Carlos no se trata de un hecho aislado, sino que forma parte de una violencia terrorista organizada y planificada, que actúa por motivaciones ideológicas, y que se ha cobrado ya demasiadas víctimas, como para permanecer en silencio. Los datos de la violencia fascista hablan por sí solos: “el Informe Raxen habla de más de 80 víctimas identificadas hasta la fecha como crímenes de odio por racismo o intolerancia”.
Y ante esta terrible y vergonzosa situación, nos preguntamos:
¿Cómo es posible que las instituciones y responsables políticos miren hacia otro lado, legalizando y legitimando las actividades y manifestaciones de la ultraderecha, mientras desde esas mismas instituciones y responsables políticos se persigue, criminaliza y encarcela a quienes tratan de oponerse a que el odio fascista y racista se extienda por nuestras calles?
¿Tendrá algo que ver, el hecho preocupante y escandaloso de que un elevado porcentaje de neonazis pertenezca a los cuerpos de seguridad del estado o al propio ejército, como el caso del asesino Josué Estébanez?
¿Tendrá algo que ver, que durante la denominada transición, se decidiera no llevar a cabo una depuración en los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, de aquellos elementos directamente vinculados al régimen franquista, como debiera haber sucedido?
Por todas estas razones, y siendo conscientes, de que con el juici al asesino de Carlos, llegan unos días que van a ser duros, hemos decidido actuar con firmeza, y hacer público nuestro apoyo a Mavi y a su familia, así como a tod@s l@s antifascist@s que durante cerca de dos años no han dejado de recordar a su compañero asesinado. Y hacemos una invitación a todas las personas DEMOCRATAS y HONESTAS a que actúen como corresponde en estos casos.
Por todo lo manifestado, estamos hoy aquí, en esta rueda de prensa, y estuvimos ayer junto a Mavi en la manifestación convocada por amig@s y compañer@s de Carlos, y también estaremos presentes en el juicio al asesino neonazi Josué Estébanez, que tendrá lugar del 14 al 18 de septiembre en la Audiencia Provincial de Madrid, calle Santiago de Compostela, nº 98.
Porque nosotr@s, somos madres y padres antifascistas, y así lo expresamos públicamente.
El 11 de noviembre de 2007, segaron la vida de Carlos, como le pudo haber sucedido a cualquiera de nuestr@s hij@s .
¡Ser antifascista no es un delito, es un deber ético y democrático!
¡Ánimo Mavi, y amig@s y compañer@s de Carlos, estamos con vosotr@s!